Hoy desperté y a mi lado estabas tú. Eres quien me robo mis
sueños, quien me llena de inspiración, de paz, de amor. Late mi corazón
solamente para ti. Eres como los primeros rayos de sol en la primavera,
aquellos que ven las flores crecer llenando mi corazón de ti.
Fluyen las palabras como ríos de agua viva cuando cierro los
ojos y veo tu sonrisa. Esa misma sonrisa que un día vi bajo la luz de un
atardecer, aquella vez que te prometí conocerte, y me prometí amarte algún día.
A veces callo. A veces me llenas tanto que no sé ni que
decir y simplemente te miro cuando duermes. Esa paz que me das al verte, esa
paz que nunca había sentido me la regalas con tus abrazos, con tenerme entre
tus brazos. Me conoces bien, aunque estemos lejos siempre para ti estaré; tu
fiel confidente.
Eres mi verano, aquella brisa que arrulla al silencio. Tu
voz es la ternura que abraza mi alma. Soy una simple alma enamorada del diseño
de Dios en ti plantado. Por mi cabeza y por mi cuerpo ahora solo escucho las
tonadas del piano y de la guitarra, sonar cada día con más fuerza, con más
cariño, con más amor.
Cuando despierto a tu lado, me refugio entre tus brazos. Tus
labios beso y en tus ojos me pierdo. Pierdo el miedo porque contigo estoy. Paz,
simplemente paz. El tiempo y el mundo se paralizan con solo estar contigo, nada
más importa. Escribo solo para ti, pienso por ti y vivo soñando contigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario